Capitulo cuatro.
El despertador sonó a las nueve… buufff... He dormido apenas tres hora, y me toca una ajetreada mañana de compras con mis hermanas. Miro el móvil. Cuatro llamadas pérdidas de Julia. ¿Qué querrá?
- ¡Eli! ¡Por fin te encuentro!
- Hola Juli, ¿Qué ocurre?
- Coge dinero, que nos vamos de compras
- Ya lo sé Juli, lo hablamos ayer
- Pero aparte de eso… va a venir… ¿Va a venir Samuel?
- No, esta mañana era para estar con vosotras, ¿por qué?
- No sé, a Lucia y a Pétula nos las cae muy bien, y a mi, sinceramente… sin más, preferíamos quedar contigo a solas, a demás vendrá Jorge.
- ¿con Elena?
- No, Elena tiene clase de baile, Ana no va a ir, dice que prefiere venir de compras…
- Dios mío, que milagro. –reímos-
- Bueno ahora nos vemos, te quiero Eli.
- Y yo a ti Julia.
¿No las cae bien? No lo entiendo. Pero bueno, no pienso dejar que eso se interponga entre Samuel y yo, encajamos perfectamente, nadie podría decir lo contrario.
Mm… hace bueno, me pondré esto. Decidí ponerme un vestido de palabra de honor blanco, precioso, fue mi regalo de cumpleaños del año anterior. Me encanta. Unas sandalias quedarán perfectas, me recogeré el pelo en una trenza e lado, ara estar fresquita, ralla de color azul, para resaltar mis ojos azul cielo y rímel negro. ¿Me habré pasado? Sólo vamos a ir de compras… Bueno, lo hecho, hecho está. Empezó a sonar mi móvil.
- ¿Diga?
- Hola Eli, soy Ana. Baja estoy en tu casa. Te vengo a buscar. Quiero hablar contigo.
- Bajo ahora.
Ya me imagino lo que me tendrá que decir, me voy a preparar para el maratón de palabras que vienen. Bueno, no me queda otra. Cogí las llaves, la cartera y el móvil y salí con la cabeza bien alta de casa.
- Hola Ana, ¿Qué es lo que pasa?
- No sé si te habrá llamado Julia, pero según lo que dijeron ayer, no las cae muy bien Samuel… yo le conozco desde hace bastante más, y, sinceramente me parece muy buen chaval, siempre se ha estado preocupando por ti, creo que todo va a salir bien. No le dejes porque te hayan dicho eso.
- Sí, me ha llamado julia y ya me lo había dicho, y no, tranquila, no pensaba dejarle. Creo que cuando le lleguen a conocer de verdad le cogerán cariño. Vamos a la parada, seguiremos hablando por el camino, o perderemos le bus.
Ana, sin duda es la que más me comprende. Suena mi móvil.
- Hola princesa.
- Hola cariño, ¿qué tal la noche?
- Muy solito sin ti…
- No habrá sido para tanto, no exageres…
- Como me conoces, ¿Qué tal con las chicas de compras?
- Pues muy bien de momento, no me has dado tiempo ni a empezar, me acaba de venir a buscar Ana y vamos a coger el bus ahora.
- Ah bueno, Mañana me gustaría que vinieras conmigo y con Roberto a hacer fotos, puede venir Ana, si quieres…
- ¿Con Roberto? ¿No será peligroso?
- No, tranquila, voy a decir que me has pedido que te lleve a una sesión de fotos…
- Bueno, iré ¿nos pasas a buscar a Ana y a mí?
- Vale, luego por la noche te llamo y aclaramos la hora, ¿Vale? Te quiero Princesa.
- Y yo a ti amor.
Una sesión de fotos con Roberto, este chico estaba loco, pero me encanta… He visto fotos de ese tal Roberto en el tuenti, son muy buenas, seguro que es el mítico chico con una nikon impresionante.
- ¿A dónde tengo que ir por la tarde mañana ¿- preguntó Ana, ya casi ni me acordaba de ella… -
- ¡Ah! Nada, una cosa muy simple, irás conmigo y con Samuel a una sesión de fotos, por cierto ¿te he comentado que irá Roberto, un amigo de Samuel?
- ¡Queeee! ¡Qué vergüenza tía! Que solo conozco a Samu y un poco… madre mía, porque te quiero mucho, que si no, no iba.
- ¡Aiiis! Mi niña, ¡cómo te quiero!
Y así entre risas y historias llegamos a la parada con las demás. El resto de la mañana fue bastante normal, el tema principal de esa mañana era Samuel, ¿Por qué las gusta tan poco? Si es encantador… Buff… no me apetece quedar con Samuel, le llamaré y se lo contaré.
Ya está, bueno, no se lo ha tomado tan mal… Que Julia me dijera que un día nosotras cinco nos íbamos a distancia me hizo mucho daño, no me lo podía imaginar, ¿Vivir sin ellas? Una locura… prefiero no pensarlo… Me conectaré al tuenti. Julia estaba conectada, la abiré conversación.
· Yo: (L)
·
· Yo: que taal?
·
·
· Yo: bieen qe has hecho pro la tarde?
· sabes quee?
·
·
· Yo: me he comprado un pantalón rosa precioso y el pantalón de Cris costó 20 € es muy potito
·
·
· Yo: mañana tenemso qe quedar por huevos
·
·
· Yo: qe hacemos?
·
·
· Yo: a este paso no volveremos a quedar nunca
·
· Yo: y...?
· 

· nos toca en clases separadas
· no me adelantes, eh
·
· Yo: espero que no
·
·
· Yo: y ai,si?
·
· Julia: eh?
·
· Yo: que si es verdad que nos toca separadas, q?
·
· así que será 2 y 3
· en cualquier caso, solas no nos va a tocar
· captas? 

·
· Yo: pero yo quiero las cinco juntas, como siempre lo demás no me vale, os echaría demasiado de menos y si ponen dos y tres una de esas tres estaría margi
·
· y lo sabes
· y también sabes que durante un tiempo no estaremos en contacto, cuando cada una se vaya a estudiar una cosa...
·
· Yo: cállate cállate cállate!
· todavía faltan tres años, nuestra amistad es indestructible
·
· y después de la uni estaremos en contacto
·
· Yo: y si eso no pasa? 

·
· pero llevamos mucho tiempo juntas, y los amigos que hacemos a estas edades suelen ser foreveer
·
· Yo: no sé pero mira lo que ha pasado con celia, y sabemos que acabara por irse
· Bueno Julia, me voy, ya hablaremos otro rato, ¿Vale? Te quiero.
· Adiós eli.
Esa conversación con Julia me había dejado marca, ¿Tan claro tenia que no volveríamos a vernos? Eso me ha dolido, no lo entiendo, me he sacrificado durante toda una mañana escuchándolas hablar de lo malo y lo poco que las gusta Samuel, ¿Y ahora me dicen esto? ¿Es una especie de indirecta? Pues si lo es, lo he captado, no hace falta que lo vuelvan a decir, lo tengo claro, ahora lo único y esencial en mi vida es él, ellas han pasado a un segundo plano.
Otra noche que no iba a dormir, si no es por una cosa es por otra, esto no es sano, acabaré en un psiquiátrico, como un loco, bueno, eso es lo que se dice, que del amor a la locura hay un paso y creo que yo ya le he dado.
Pasó la noche, esta vez dormí más no tenía tan en mente a Samuel, pero la idea de el daño que me acababan de causar mis hermanas seguía ahí. Voy a llamar a Samu, verle y quedar con el será una buena idea.
Contesto al primer pitido.
- Hola mi príncipe.
- Hola princesa, te estaba esperando. ¿Has leído mis SMS?
- Mmm… no, ni he mirado si tenía algo, solo he cogido el móvil y te he llamado, tenía tantas ganas de oír tu voz… ¿Hoy vamos ha hacer algo?
- ¿Ya estás bien? Cómo ayer me dijiste que te encontrabas mal, había pensado ir a tu casa a darte mimitos… Por cierto que vamos ha hacer con la sesión y Roberto?
- Mmm… suena tentante tu idea… ¡Ah! No me acordaba, hoy no puedo cariño, tengo clase de inglés hasta las siete, ¿Mañana te viene bien? Quédate hoy a dormir…
- Vale, a las siete en tu casa, y esta vez llevaré pijama. Me aprece perfecto, ahroa le mando un sms y le digo a Roberto que se aplaza hasta mañana.
- Vale te espero en casa. Por la mañana no tengo anda que hacer, podrías venir y adelantar algunos de tus mimitos…
- Ahora no puedo cariño, tengo que hacer cosas… pero por la tarde te doy todos los que tu quieres y más. Te quiero preciosa.
- Y yo a ti guapo.
Tengo que avisar a Ana de que hoy al final no hay sesión de fotos, que es mañana.”Ana cariño, hoy puedes quedar con las demás al final la sesión con Roberto es mañana, ¡no acepto un no por respuesta!”
Voy a leer que ponía en el SMS que me ha mandado.
Hola princesa, buenos días, espero no despertarte. ¿Sigues malita? He pensado que ya que estas mala y no es bueno moverte mucho, podría pasarme por tu casa y darte mimos, todos los que tú quieras. Te quiero mi niña.
Es perfecto, ¿cómo no me había dado cuenta antes? Estamos arriesgando demasiado los dos en esta relación, pero por primera vez en mi vida, siento que vale la pena. ¡Tengo una idea! Le voy a escribir una carta de amor, diciéndole todo lo que le quiero. Sí creo que es buena idea, además, ahora me siento inspirada.
25 de Junio de 2011.
Quiero explicarte todo lo que te quiero, pero no encuentro palabras, eres tan importante, te juro que me tienes loquita, siento pasión, amor, lealtad… cualquier adjetivo cariñoso es válido. Pero ninguno suficientemente grande para explicar todo lo que siento. Sé que podrías pensar que este amor es un amor de una adolescente, de los que dentro de tres meses como máximo te dejan y al día siguiente se lían con otro, pero yo sé que no, sé que esta vez no será igual. Hubo dos años en mi vida que no te vi, Sí, fue culpa de Jenny, no te vi en dos años, pero no e olvide de ti, todavía dentro de mi sentía esa ilusión al ver pasar BMW blanco descapotable, pero me fastidiaba ver que no eras tú, quería hacerme creer que te quería como un hermano, pero me he dado cuenta de que en verdad, llevo enamorada de ti casi toda mi vida, cuando era pequeña y deseaba que llegaran los fin des de semana para poder verte y jugar contigo, es algo que no puedo explicar. Como vez yo tengo bastante claro lo que siento, pero, ¿Lo tienes tú?
Te quiere mucho, la princesa del campo.
Espero que le guste, tengo tantas cosas en la cabeza que quiero decirle, demostrarle, pero no sé cómo, creo que las palabras sin insignificantes. Estoy hecha un lio, nunca antes podría imaginar dejar a mis amigas de lado por un chico y menos por Samuel, pero bueno, no me arrepiento creo que esta historia será recordada por todo el mundo.
La clase de inglés fue muy aburrida, no entiendo porque voy, es verano y he aprobado todas, con sobresaliente en inglés y todavía tengo que ir a esas estúpidas clases de inglés. Que ganas tengo de verle, hace mucho que no le veo, y le echo de menos. Sin pensármelo dos veces, aún estando sin acabar la clase de inglés, me levanté y me fui de allí lo más rápido posible. Saqué el móvil, le escribí un SMS. “He salido de inglés un poco antes, ¿puedes venir a buscarme? Está detrás del pereda. Te quiero” no tardó ni dos minutos en contestar. “Claro, ahora voy. Me muero de ganas de verte. Yo sí que te quiero.” Es genial. En menos que canta un gallo le vi llegar. Me abalancé corriendo encima de él. Le besé. Le besé como si no hubiera ahora mismo mil personas alrededor nuestro viéndonos, le bese sin importarme lo demás. Nos besamos durante unos largos minutos.
- Tenía muchas ganas de verte.
- Se nota.- y mientras nos reíamos pusimos rumbo a mi casa.-
Incluso antes de entrar en casa ya estábamos besándonos, casi sin darnos cuenta llegamos a mi habitación, nos tumbamos en la cama, el encima mío, expulsaba excitación por todas partes de mi cuerpo, tenía muchísimas ganas de que fuera mío de una vez por todas, notaba como su mano tocada cada una de mis partes más intimas. Pero no me oponía le dejaba hacer lo que quería conmigo.
- ¿Crees que ya estas preparada?
- Creo que sí, pero no lo sé, me da vergüenza, no es que tenga una bella escultura para lucir…
- No digas estupideces, eres preciosa. Entonces… ¿Quieres que sea el primero?
- Quiero que seas el primero y el último.
Noté como su suave mano me quitaba la camiseta, mis manos las cuales no las controlaba desabrochaban su pantalón. Estaba fuera de mí. Y cada vez más desnudos, cada vez más excitado, entre gemido y gemido un beso.